Tu negocio debe tener un propósito, o fracasará
AI has already shut off the lights for businesses that still operate. In this liminal era, your purpose is your only defense. Discover why focusing only on profits makes you obsolete and what human skills are key to survival.
Estamos cruzando un puente, atravesando una época liminal.
Dejamos atrás el viejo mundo.
Y nos enfrentamos a uno nuevo, a lo desconocido: un paisaje radicalmente distinto, donde la IA dirige nuestras empresas y realiza nuestros trabajos.
Antes de llegar al otro lado, debes preguntarte: ¿cuál es tu propósito? ¿Qué te empuja hacia lo desconocido?
Por qué necesitas un propósito
El dinero no puede ser tu principal motivación. Si lo es, ya no tienes un negocio, aunque todavía no lo sepas.
Tu empresa debe defender o buscar algo más que dinero.
Hace unas semanas, pude conversar con Rodolfo de Felipe, fundador y presidente de LIDE Argentina.
Durante nuestra charla, hablamos sobre lo que hoy significa el éxito. Y nos dimos cuenta que la mayoría de las organizaciones:
Se enfocan solo en los resultados y las ganancias.
No tienen ningún propósito. Venden productos y servicios sin perseguir un objetivo mayor.
Quizás aporten a causas humanitarias o medioambientales, pero son gestos superficiales y su público lo sabe. Los consumidores son mucho más inteligentes de lo que pensamos.
Tu propósito no puede ser una fachada. Y no siempre será conveniente.
Tu propósito debe ser real y auténtico. Porque como dijo Simon Sinek: “La gente no compra lo que haces, compra por qué lo haces”.
En las próximas décadas, será tu propósito lo que te mantendrá a flote.
Por qué hago lo que hago
En Santex, nuestro propósito es simple: darle un propósito a todo lo que hacemos como organización.
Creemos que la tecnología debe ponerse al servicio de la humanidad, no al revés. Debe empoderarnos, no deshumanizarnos.
Sin embargo, no todos están de acuerdo con esto.
Como expliqué hace poco en un podcast, las empresas de Silicon Valley piensan en la innovación como un fin en sí mismo. No les importa ni el costo humano ni el valor real.
Pero en mi opinión, si la innovación no resuelve los verdaderos problemas de las personas, entonces es solo ruido.
Admiro mucho más a los emprendedores africanos que, aún con pocos recursos, están transformando vidas y ayudando a construir un planeta más sostenible e inclusivo.
Ellos lo entendieron todo: si no construimos nuestro propio futuro, alguien lo hará por nosotros.
Construyendo el futuro de la IA
No podemos quedarnos con los brazos cruzados mientras la IA decide sobre nuestras vidas.
Debemos tomar las riendas de la evolución de la IA. Y para lograrlo, tenemos que saber el rol que vamos a cumplir los humanos.
Según el Foro Económico Mundial, los empleadores del futuro buscarán:
Pensamiento creativo
Curiosidad
Aprendizaje continuo
Influencia social
Resiliencia y flexibilidad
Son todas cualidades ligadas a la experiencia humana, no a la habilidad computacional.
Integrar la IA no se trata de implementar una o dos herramientas. Se trata de reconocer dónde siguen siendo necesarios los humanos y de qué conviene que se encargue la IA.
Porque el problema es el siguiente:
Muchas empresas, escuelas y universidades siguen enseñando cosas que la IA puede hacer mejor y más rápido.
No actualizaron ni sus planes de estudio ni sus materiales de referencia. Están formando alumnos y empleados para ser desechables y reemplazables.
Por eso, necesitamos tomar el control de la narrativa. Y contar una historia que haga irremplazables a los humanos.
Diseñando el futuro que queremos
Lo peor que puedes hacer es darle la espalda al progreso.
En el 2023, el gobierno senegalés cortó el acceso a internet durante las revueltas populares de junio y julio. Lo único que logró fue frenar el crecimiento económico, censurar la libertad política y reprimir el potencial humano.
Hace unos meses, el Tribunal de Justicia de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) determinó que el corte fue ilegal: habría vulnerado los derechos de las personas a la expresión personal y al acceso a la información.
El camino nunca puede ser para atrás o para el costado. Es siempre para adelante. Y al transitarlo, necesitamos un propósito que nos guíe.
En Santex, a medida que nos adentramos en el futuro de la IA, nuestra convicción es: seguir contratando, empoderando y celebrando a los humanos.
Porque más que reemplazarnos, la IA tendría que abrir espacios donde los humanos puedan florecer.
Así que acompáñenme. Crucemos este puente juntos.
Con amor humano,
Juanca